Esta obra de Ana María Matute relata la historia de Adriana, una niña que nació cuando sus padres ya no se querían. Es una novela llena de sentimientos y de hostilidades. Adriana o Adri, separa su mundo del de los Gigantes. Teme a los adultos y convertirse en uno de ellos. Se siente sola, no sabe por qué su padre se ha ido de casa, y todo el mundo quiere que sea como su hermana Cristina. Solo se identifica con Eduarda (su tía), Isabel y en menor medida con la Tata María (las criadas).Un día llega un niño nuevo, Gavi. Al principio sole se vigilan el uno al otro, pero al final, surge en ellos una amistad inseparable.
Toda la realidad se describe desde un punto de vusta diferente. La familia es de la clase acomodada del Madrid de la segunda República. Aunque en el libro se hacen comentarios a la revuelta situación como la quema de convetos, todo se centra en el mundo personal e individual de Adri. Ella quiere ser como Eduarda, una mujer independiente, que no acúa como el resto de los Gigantes, y que no le dice como tiene que ser.
Toda la obra está repleta de imaginación con aire poético, y con un gran uso del lenguaje. No es uno de los mejores libros de la autora pero no deja de ser una buena novela.
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